
Sin embargo, para mí, desde este año 2009 de la post-modernidad, el 21 de Junio ha adquirido un significado especial...es, el Día de la Música, ese leit motiv que siempre ha estado rondando mi vida, bien siendo parte integrante o simplemente, como ahora, parte disfrutante.

Simplemente, es algo impresionante cómo, estos aborígenes de Tres Cantos, consiguen traducir los sentimientos de toda una generación con respecto al mundo que les ha tocado vivir, con una expresividad apabullante y un nivel musical muy difícil de conseguir reinventándose en cada concierto.
Éste fue acústico, íntimo, de escalofríos por la espalda y coros infinitos, con una invitada de lujo, Christina Rosenvinge, road to Chicago.

Under water tea party (simplemente brutales!), Josele Santiago, Gilberstástico (alias el Maestro Papero, que se vio sólo en el escenario por la no asistencia de Los Mierdas Flotantes), Extraperlo, Julio de La Rosa, Nudozurdo y por supuesto, para mí el colofón del día...Mendetz, ese grupo robótico que puso la B.S.O. a Berta Collado, en ese programa que conoce lo que hace la gente.
Llevábamos allí más de 8 conciertos pero aún quedaba música para largo, no en vano aún no habían tocado los Sunday Drivers, Russian Red y algún que otro trovador pero tuvimos que autoconvencernos y decir mejor aplaude y vámonos, que termine esta función si bien nos hubiera encantado entonar el clásico del barco de Chanquete no nos moverán.
No hay comentarios:
Publicar un comentario